RESPETABLE CORONAVIRUS:
-No se de donde saliste ni como llegaste a este mundo, pero si se que vivo en un mundo controlado por un Dios soberano, por ahora ríes y haces con este mundo lo que se te antoja, pero no olvides que hay una promesa en Romanos 8:28 para el pueblo de Dios.
-Nos has hecho cerrar las puertas del lugar donde se reúne la iglesia y estoy muy enojado por eso, pero entonces recuerdo la persecución contra la iglesia primitiva y sonrió al leer como eso únicamente los sacudió de su comodidad, supongo que al igual que yo, se enojaron al dejar Jerusalén, pero sonrieron después, cuando eso los obligó a predicar la palabra de Dios en el resto del mundo; la persecución no los destruyo… ¡los hizo más fuertes!
-Has mandado a los cristianos de todo el mundo a sus casas, pero te prometo, pronto saldremos y no seremos iguales, de una vez te advierto, volverá un ejército, un ejército que valorará el significado de congregarse, un ejército que comprenderá que la vida no es eterna y comenzará a predicar la palabra como en los inicios de la iglesia, nos has incomodado, pero al igual que la iglesia primitiva, esta incomodidad no nos destruirá… solo nos despertará y nos volverá más fuertes.
-Nos has prohibido dar besos y abrazos entre nosotros, pero cuando tu te vayas, abrazaremos al mundo entero y tu no podrás pararlo, la indiferencia y egoísmo terminarán, la falta de amor no volverá a ser un pretexto para abandonar la iglesia.
-Pronto harás pedazos la economía mundial, probablemente perdamos bienes y pasemos momentos difíciles, pero creo que nunca has leído Filipenses 4:11-13, así que entiendelo, nada de lo que tu nos robes podrá arrebatarnos la felicidad pues esa nos la da el Espíritu Santo y El es alguien que tu no puedes quitarnos, El nos selló hace muchos años y estará con nosotros aún en los momentos más oscuros, siempre lo ha hecho, siempre lo hará.
-¿Pensaste que claudicaríamos al vernos pasarla mal financieramente? tal vez a los charlatanes pero jamás al pueblo que ha conocido a su Dios ¡al contrario! quizá nos hacia falta despojarnos de todo, pues recuerdo que los más grandes hombres de Dios, se levantaron cuando no tenían nada que perder, así que prepárate porque gigantes dormidos están por salir a la guerra.
-Probablemente algunos vuelvan atrás, ¡pero los que hemos conocido a Jesucristo jamás!, ¡entiéndelo querido coronavirus! no hay nada que nos puedas quitar, ni tu ni nadie, pues hace mucho lo entregamos todo a nuestro creador, ni siquiera nuestras vidas nos pertenecen, todo es de Dios y no hay nada que tu puedas hacer al respecto.
-Has traído miedo a este mundo, se que pronto te irás y también se que después vendrán más y más situaciones difíciles, Jesús ya no los dijo en Mateo 24, probablemente estés allí para verlo pues algunos dicen que cuando nos hagamos inmunes a ti, seguirás entre nosotros como la influenza estacional, ya no nos harás más daño, serás un espectador del juego y déjame contarte algo, veras este mundo de cabeza pero la iglesia seguirá de pie, no lo digo yo, lo anuncio Jesús hace 2000 años, algunos hoy lo ignoran pues tanto msj humanista les ha hecho olvidar que esta vida no lo es todo y que lo material no es nada, pero en medio del caos que vendrá, muchos recordaremos las palabras de Jesús en Lucas 21:28.- “Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención está cerca”… y escúchame, estaremos alli, de pie, listos, armados, valientes, sonriendo, para enfrentar lo que sea, pues… ¿qué o quién puede atemorizar a un ejército que tiene la vida eterna?, Rom 8:31-39
-Has mandado a mucha gente a sus casas y por ahora reinas en las calles, ¡lo que tu no sabes es quien reina en nuestros hogares! para muchas familias la cuarentena era necesaria, los pretextos se acabaron, ahora tendrán oportunidad de pasar tiempo juntos, de jugar con sus hijos, de hablar, de buscar a Dios, de ponerle pausa al ajetreo de todos los días para poner su vida en orden… no festejo que estés aquí, pero comienzo a entender que quizá era necesario.
-Muchos predican que no tocarás a la iglesia, escucho pastores prometer que no pasará nada a la salud de sus congregantes, están equivocados y quizá es porqué desconocen lo que has hecho con cristianos de otros países, probablemente no han leído que Dios no guardo a Esteban y han olvidado las muertes de tantos mártires en la historia, algunos se decepcionaran cuando vean que les mintieron, pero es cuando se darán cuenta que nuestra esperanza no está en esta vida sino en la vida eterna, entonces el pueblo de Dios entenderá que la vacuna que realmente necesita, es la sangre de Cristo, dejarán de escuchar sermones terrenales, materialistas y centrados en el ser humano… ¡y Jesucristo volverá a ser el centro de los mensajes que se se prediquen en la iglesia!
-“Querido” coronavirus, dicen que eventualmente serás adquirido por el 70-80% de la población mundial, y que por ahora la mejor defensa es nuestro sistema inmunológico, que debemos fortalecerlos comiendo y durmiendo bien, haciendo ejercicio y estando en paz, todo eso lo estoy haciendo, me estoy preparando, estoy más fuerte que nunca en todo sentido, así que escúchame bien, y si tu no me oyes, entonces que lo haga el reino de las tinieblas que seguramente ha leído con atención esta carta… pronto saldré, te encontraré y te haré pedazos, y si por alguna extraña razón no fuese así, el día que tu, algo o alguien terminé con mi vida (lo cual sucederá tarde o temprano) inmediatamente iré a la presencia de Dios, por eso estoy en paz y no tengo miedo, pues no me puedes robar lo que no tengo… y lo que no sabías, es que hace muchos años yo ya perdí mi vida, yo ya fui sepultado, ahora le pertenezco a Jesucristo, el hijo del Dios viviente, quien dio su vida por mi y por todo aquel que esta leyendo esta carta, para que si creen en El, no se pierdan más tengan vida eterna, Juan 3:16.
-Así que, “querido” coronavirus, tu y cualquier adversidad, natural o sobrenatural, humana o demoníaca… ya fueron derrotadas hace mucho tiempo, exactamente, hace 2000 años
… y no fue con una vacuna, fue con una cruz.
Atte Jessie Bermudez